La taurina favorece la digestión de las grasas y ayuda a mantener niveles normales de colesterol y tensión arterial y es el aminoácido más importante y abundante en el corazón, donde una de sus principales funciones es el apoyo a la salud cardiovascular, mejorando el flujo sanguíneo y el suministro de oxígeno a las células del corazón. Aumenta la efectividad de las contracciones del músculo cardíaco y normaliza las irregularidades del ritmo cardiaco.
La taurina también ayuda a proteger la salud ocular.

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